Inicia el gobierno de Cuauhtémoc Blanco…
Instruye al comisionado estatal de seguridad publica recuperar la confianza ciudadana/ La seguridad publica la tarea más urgente de su gobierno/ Cumplir y hacer cumplir la ley su principal responsabilidad…
Carlos O. Morales…
Noche fría en el municipio de Emiliano Zapata, sede del centro de operaciones policiacas C-5, alrededor de las 23.45 horas del ultimo día de septiembre y ultimas horas del nefasto gobierno perredista, a escasos minutos de iniciar el nuevo gobierno de Cuauhtémoc Blanco Bravo, los elementos de seguridad pública estatal, reunidos en los patios del C-5 esperan el arribo del nuevo mandatario, quien en su papel de comandante en jefe, pasará revista a los policías encargados de velar por la seguridad de todos los morelenses.
Las medidas de seguridad para ingresar al C-5 son exageradas pero deben cumplirse, ya dentro de las instalaciones, el gigantesco monolito de concreto se impone, es un verdadero refugio impenetrable, sin duda hay más seguridad que en las calles.
Cuauhtémoc Blanco llegara en su poderosa camioneta blanca y su equipo de seguridad y de inmediato el secretario de Seguridad Pública Estatal le ofrecerá una casaca blanca y una gorra del mismo color, para saludar a algunos de los nuevos mandos, y de inmediato se avisa el ajuste de tiempo para que a las cero horas y un minuto del primero de octubre, el nuevo mandatario hable ante los elementos policiacos ahí reunidos.
En tanto, camarógrafos y reporteros ajustaran sus tripees, para sacar sus imágenes y videos, son pocos a esta hora del nuevo día, todos conocidos, Mónica González, Raúl González y Pedro Tonantzin, ambos corresponsales, Raúl Morales, el responsable de las comunicaciones de mandatario estatal, Jorge Jiménez, Miguel Ángel García, Pedro Oceguera y Martha Cerón, y llegarían retrasados, Alfredo y Christian Salazar.
La presencia y la salutación a los jefes policiacos concluye cuando justo a las cero horas y un minuto del nuevo día primero de octubre, Cuauhtémoc Blanco Bravo habría de señalar que la seguridad pública será su principal y más urgente tarea de su gobierno.
El gobernador de Morelos, precisó que esa responsabilidad, la misma para cualquier gobernante, es cumplir y hacer cumplir la ley, por lo cual instruyó al comisionado estatal y al Secretario de Gobierno, para que se cumplan y alcancen los objetivos fijados en la nueva estrategia policial cuyas prioridades son: el fortalecimiento de las relaciones entre los tres niveles de gobierno, para dar cumplimiento a lo establecido en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Así como establecer y mantener una relación de confianza con la sociedad morelense, y para ello, se deberá integrar mesas regionales de seguridad y justicia, donde los diferentes organismos ciudadanos encuentren soluciones a los problemas locales y específicos de cada región con resultados medibles y auditables.
Además, escalar las capacidades del Centro de Coordinación, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C-5) y tener la capacidad de analizar información para generar inteligencia policial para que se refleje en un aumento de la seguridad de todos los morelenses.
Cuauhtémoc Blanco Bravo, dijo también que se activará una nueva policía turística en todo estado, para incentivar el desarrollo de las comunidades que dependen económicamente de esta actividad.
En el intermedio para adecuarse a la hora fijada para el discurso del nuevo gobernador, los ex jefes policiacos, los mismos que llegaron con Capella, acudieron al C-5 para despedirse, ya sin los uniformes que en lugar de dar confianza hacían que se les tuviera hasta temor y recelo, los uniforme quedaron atrás, ahora solo de guayaberas y con un sonrisa que no podían ocultar, saben que Cozumel es su próximo destino.
Noche fría en el municipio de Emiliano Zapata, sede del centro de operaciones policiacas C-5, alrededor de las 23.45 horas del ultimo día de septiembre y ultimas horas del nefasto gobierno perredista, a escasos minutos de iniciar el nuevo gobierno de Cuauhtémoc Blanco Bravo, los elementos de seguridad pública estatal, reunidos en los patios del C-5 esperan el arribo del nuevo mandatario, quien en su papel de comandante en jefe, pasará revista a los policías encargados de velar por la seguridad de todos los morelenses.
Las medidas de seguridad para ingresar al C-5 son exageradas pero deben cumplirse, ya dentro de las instalaciones, el gigantesco monolito de concreto se impone, es un verdadero refugio impenetrable, sin duda hay más seguridad que en las calles.
Cuauhtémoc Blanco llegara en su poderosa camioneta blanca y su equipo de seguridad y de inmediato el secretario de Seguridad Pública Estatal le ofrecerá una casaca blanca y una gorra del mismo color, para saludar a algunos de los nuevos mandos, y de inmediato se avisa el ajuste de tiempo para que a las cero horas y un minuto del primero de octubre, el nuevo mandatario hable ante los elementos policiacos ahí reunidos.
En tanto, camarógrafos y reporteros ajustaran sus tripees, para sacar sus imágenes y videos, son pocos a esta hora del nuevo día, todos conocidos, Mónica González, Raúl González y Pedro Tonantzin, ambos corresponsales, Raúl Morales, el responsable de las comunicaciones de mandatario estatal, Jorge Jiménez, Miguel Ángel García, Pedro Oceguera y Martha Cerón, y llegarían retrasados, Alfredo y Christian Salazar.
La presencia y la salutación a los jefes policiacos concluye cuando justo a las cero horas y un minuto del nuevo día primero de octubre, Cuauhtémoc Blanco Bravo habría de señalar que la seguridad pública será su principal y más urgente tarea de su gobierno.
El gobernador de Morelos, precisó que esa responsabilidad, la misma para cualquier gobernante, es cumplir y hacer cumplir la ley, por lo cual instruyó al comisionado estatal y al Secretario de Gobierno, para que se cumplan y alcancen los objetivos fijados en la nueva estrategia policial cuyas prioridades son: el fortalecimiento de las relaciones entre los tres niveles de gobierno, para dar cumplimiento a lo establecido en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Así como establecer y mantener una relación de confianza con la sociedad morelense, y para ello, se deberá integrar mesas regionales de seguridad y justicia, donde los diferentes organismos ciudadanos encuentren soluciones a los problemas locales y específicos de cada región con resultados medibles y auditables.
Además, escalar las capacidades del Centro de Coordinación, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C-5) y tener la capacidad de analizar información para generar inteligencia policial para que se refleje en un aumento de la seguridad de todos los morelenses.
Cuauhtémoc Blanco Bravo, dijo también que se activará una nueva policía turística en todo estado, para incentivar el desarrollo de las comunidades que dependen económicamente de esta actividad.
En el intermedio para adecuarse a la hora fijada para el discurso del nuevo gobernador, los ex jefes policiacos, los mismos que llegaron con Capella, acudieron al C-5 para despedirse, ya sin los uniformes que en lugar de dar confianza hacían que se les tuviera hasta temor y recelo, los uniforme quedaron atrás, ahora solo de guayaberas y con un sonrisa que no podían ocultar, saben que Cozumel es su próximo destino.
Comentarios
Publicar un comentario